La agricultura de precisión está redefiniendo la manera de gestionar el agua en el campo. Ya no se trata de regar más, sino de regar mejor: solo lo necesario, en el momento justo y en la zona exacta.
Gracias a sensores IoT, estaciones agroclimáticas e imágenes satelitales o de dron, los agricultores pueden ajustar el riego por parcela, detectar el estrés hídrico antes de que afecte al rendimiento y reducir drásticamente el consumo de agua sin sacrificar productividad.
En esta guía te explicamos cómo empezar paso a paso, qué tecnología seleccionar y cómo medir el impacto real en eficiencia y costes.
El Internet de las Cosas (IoT) ha llegado al campo para quedarse. Con sensores distribuidos en el terreno, se pueden recopilar datos sobre:
Estos datos se envían mediante gateways a una plataforma que los procesa y visualiza en tiempo real, permitiendo tomar decisiones inmediatas sobre riego, abonado o tratamiento fitosanitario.
La elección del sensor es clave para garantizar lecturas fiables:
Una combinación de ambos puede ofrecer un modelo híbrido eficaz, equilibrando coste y precisión.
El uso de imágenes satelitales o drones complementa los datos de campo mediante índices de vegetación:
Combinando ambos, puedes detectar zonas con déficit de agua antes de que el cultivo muestre síntomas visibles, ajustando el riego de manera preventiva y evitando pérdidas de rendimiento.
Este flujo permite pasar de un modelo de riego “por calendario” a un modelo dinámico basado en datos reales.
Fase 1 – Piloto (0–30 días)
Fase 2 – Ajuste (30–60 días)
Fase 3 – Escalado (60–90 días)
Concepto | Coste estimado (€) | Beneficio esperado |
---|---|---|
Sensor de humedad + gateway | 400–800 €/ha | Reducción del 20–30% en consumo de agua |
Plataforma IoT anual | 150–300 €/año | Mejora del rendimiento y trazabilidad |
Dron o imágenes satelitales | 50–100 €/ha/año | Detección temprana de estrés hídrico |
Automatización de riego | 1.000–2.000 € | Ahorro energético por bombeo y horas de trabajo |
Estos indicadores permiten cuantificar el impacto del sistema y escalarlo a más parcelas con datos sólidos.
La agricultura de precisión es mucho más que tecnología: es una nueva forma de gestionar el recurso más valioso del siglo XXI —el agua— con inteligencia y sostenibilidad.
El uso de sensores IoT, teledetección y análisis de datos permite a los agricultores aumentar la rentabilidad, mejorar la resiliencia ante el cambio climático y contribuir a un modelo productivo más responsable.
En Menttoriza acompañamos a startups y cooperativas que desarrollan soluciones de agricultura inteligente y gestión del agua, ayudándolas a escalar proyectos de impacto. Descubre más en nuestra vertical de Agrotech o consulta nuestro artículo sobre agricultura de precisión con drones e IoT.
Para ampliar información sobre sostenibilidad hídrica y tecnología agraria, visita Open Knowledge de la FAO.